Ya estoy aquí

Ya se han acabado las fiestas y vuelvo poco a poco a la normalidad, salvo porque aún no tengo clases de conducir hasta que el profe vuelva de sus vacaciones. Uff, menos mal que me dejan un margen sin coche.


La tienda de lanas cerró por fin, aunque a mí me hubiese gustado una liquidación más a lo bruto, me refiero a que podía haber bajado los precios mucho más el último día. Así hubiese conseguido que me llevase la tienda completa y se deja de tonterías, porque ahora me dice que tal vez me llame dentro de unos días para hacer el remate-remate-remate final. Seguro que luego llego y lo tiene todo al mismo precio. Pues si es así ya no vuelvo a comprar nada más. Esta vez lo prometo (ejem, ejem)


Por otro lado he estado estos dias completamente inmersa tejiendo este "cubreubres" (el nº 24). Un único problemilla. Para tejerlo estoy usando los mismos ovillos con los que tejí los calcetines, pero no se si me va a llegar. Craso error. He pasado esta mañana por el mercadillo para ver si milagrosamente encontraba un ovillo del mismo color, pero nada, tenía en otros colores, pero en ese no. Así que estoy pensando que como no me llegue tal vez tenga que hacer una cosa que no pensé que haría nunca. ¡DESHACER EL CALCETÍN! Por el momento voy a acabar la segunda manga y veré cuanto me sobra. En ese momento tendré que tomar una decisión. DESHACER O NO DESHACER, HE AHÍ EL DILEMA.


Os dejo con la foto. Hasta la próxima.